¿Qué iluminación escoger para tu baño?

La iluminación en el baño es algo fundamental para garantizar la funcionalidad y seguridad. Existen muchos tipos de luz para baños  incluyendo opciones populares como las luces LED; general, puntual, decorativa… Cada una pensada para una función específica. Y es que dependiendo de qué luz pongamos, podemos alterar la percepción de los volúmenes, los colores e incluso nuestro estado de ánimo.

El baño es uno de los lugares de nuestra casa donde hacemos muchas de nuestras tareas más rutinarias. Desde una luz para maquillarte o afeitarte hasta una que sea más tenue para cuando vas de madrugada o al acostarte. Por eso vamos a ver los tipos de iluminación que podemos utilizar para nuestro baño y conseguir el efecto deseado

Luz general

La luz general es aquella que nos permite desplazarnos por el baño de manera uniforme, sin ver sombras o zonas más oscuras. Aporta una luminosidad a toda la estancia y es la que es más similar a la luz natural. Podemos encontrarla en lámparas de techo para baño o luces empotradas en el baño, siendo estas últimas una opción discreta y moderna.

Luz puntual

La iluminación puntual tiene como objetivo iluminar una zona del baño concreta de una actividad, como el lavabo o la ducha.

· En espejos

La zona del espejo es de las más usadas y en las que más hay que centrarse para tener una buena iluminación para conseguir una luz de espejo para baño óptima y sin sombras. Apliques para espejo de baño situados lateralmente a la altura del rostro para una iluminación homogénea, hasta las modernas luces LED para espejo de baño integradas, que potencian tanto la visibilidad como la estética. Otra alternativa son los apliques de pared para baño sobre el espejo o focos direccionales, siempre cuidando que no generen sombras molestas.

· En la ducha

A la hora de crear un ambiente más cálido, se suele incorporar iluminación en la ducha. Esta iluminación específica para la ducha debe ser sutil y cálida para transmitir relajación. Las opciones más recurrentes son las tiras empotradas en los techos o en las hornacinas, aportando un toque moderno y seguro.

Iluminación decorativa

Los baños ya no son solo funcionales, se han convertido en una estancia más que decorar y mostrar esa personalidad, por eso también se suele incorporar iluminación decorativa. Ya sea a modo de pequeñas lámparas en una estantería, o a una iluminación indirecta con luces LED debajo de un mueble. El objetivo es seguir creando esa atmósfera cálida y tranquila que complementa las luces principales del baño.

Iluminación regulable

Cuando vas al baño por la noche o en esos momentos en que te acabas de despertar, no necesitas una luz general, sino algo ligero. La iluminación regulable en tus luces de baño es la solución ideal, te permite ajustar la intensidad de la luz según tus necesidades.

Finalmente, algo que no podemos pasar por alto es la temperatura de la luz. No conseguiremos la iluminación perfecta en nuestro baño si no ponemos la temperatura correcta. El ojo humano percibe luz cálida y fría en función del amarillo o azul. En el caso del baño, el objetivo es crear un ambiente cálido, pero funcional, por lo que la temperatura debería ir entre 3.000K y 4.000K (Kelvin), dependiendo de la zona e iluminación que se escoja.

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